Los productos Fisher Kinder se distinguen por su compromiso con la calidad y la seguridad para los niños. Desarrollados en laboratorios farmacéuticos con certificación GMP de Alemania y Francia, estos complementos alimenticios cumplen las normas más estrictas. La marca favorece los ingredientes naturales y no controvertidos. La gama, que incluye jarabes formulados con agave ecológico, ofrece una experiencia deliciosa al tiempo que garantiza un crecimiento sano.

El compromiso con el crecimiento óptimo de los niños se refleja en la formulación de la gama Fisher Kinder. Las dosis se basan en las recomendaciones europeas, garantizando ingestas seguras y adecuadas en cada etapa del desarrollo. La marca también favorece las sinergias entre ingredientes para una absorción óptima.

Fisher Kinder opta por la vía natural para garantizar la salud de los niños. Se prefieren los extractos naturales, como el sirope de ágave ecológico, a las formas sintéticas. Este enfoque garantiza la máxima biodisponibilidad, minimizando la diferencia entre las cantidades indicadas en el envase y las que realmente absorbe el organismo.